CONDE, VICTOR
Qué increíble, ¿verdad? Pensar a quién perteneció este libro. Quién escribió esa dedicatoria. Para quién era. Es como esas fotos viejas que se amontonan en cajones en los mercadillos. ¿Las has visto? Recuerdos de gente que desapareció hace años. Para nosotros son solo rostros. No son nadie. Pero un día fueron personas como tú y como yo. Y ahora se amontonan en un cajón y no le importan a nadie.