SANT'ANNA, ANDRÉ
André SantAnna (Belo Horizonte, 1964), es hoy en día, según Juan Pablo Villalobos, el narrador más radicalmente original de las letras brasileñas. En la actualidad trabaja como guionista de publicidad, cine y televisión y en los años 80 actuó como contrabajista de la banda carioca Tao e Qual, además de desempeñarse como compositor. Su sentido musical se trasmite a su creación literaria, donde pueden percibirse ritmos y combinaciones espontáneas que parecen remitir a una sesión libre de jazz.
El presente libro, publicado en Brasil en 1998, fue su debut literario. Se trata de un poema irreverente y mordaz que apunta a la desacralización a través del humor cáustico y de asociaciones que muestran una percepción del sentido del mundo contraria al ordenamiento superficial que la cultura de lo correcto pretende sostener. Un libro en el que todo está unido, entrelazado, es uno, pero no por el supuesto orden cósmico-espiritual sino por el caos tanático de la sangre vertida por todas y cada una de sus criaturas. La creación, como dice la cita de Ernest Becker con la que André Santanna inicia su libro,
es una pesadilla espectacular
de la que da cuenta Amor, con voz poderosa y sin concesiones.
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Cristo y el gobierno y los coños en este mundo y aquella escena de la cobra engullendo al sapo y los leones devorando a las criaturas que salpican sangre y el sol secando la sangre de las criaturas y la sangre de las criaturas descomponiéndose y liberando carbono y formando petróleo: el combustible del piloto de coches en llamas.
El piloto quemándose y derritiéndose y liberando carbono y toda esa angustia todo el tiempo. Aquellas palabras y todos aquellos libros explicando las palabras y las palabras de los libros y la historia de Cristo, allá, todo ensangrentado en la cruz y el sol secando la sangre de Cristo y los gusanos devorando el cuerpo de Cristo y el combustible del piloto de coches en llamas y las criaturas salpicando sangre y aquel programa tan divertido en la televisión con el tipo explicando todas aquellas palabras y el dolor. El dolor y aquel libro lleno de palabras y el Presidente de la República diciendo todas aquellas cosas para el pueblo y el pueblo oyendo al Presidente de la República y el dolor del pueblo y la sangre del pueblo salpicando y el sol secando la sangre del pueblo y el pueblo en llamas en las revoluciones y el pueblo oyendo la historia de Cristo y el pueblo bebiendo la sangre de Cristo y el hedor del pueblo y el Presidente de la República y toda esa angustia entre los hombres y las mujeres follando y todas esas enfermedades en la sangre del pueblo follando y produciendo criaturas y liberando carbono todo el tiempo y los organismos hediendo y la grasa en los organismos y aquellas mujeres. Aquellos coños y todas aquellas palabras y la sangre y el pueblo comiendo el cadáver de Cristo y el pueblo comiendo cadáveres diversos y el sol, allá encima, secando el dolor del pueblo y todas las palabras y los problemas del pueblo (
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(Fragmento inicial de Amor)