PÉREZ ALVARADO, MIGUEL
Pero lo que me importa dejas claro aquí es que viaje y hogar no son ni formas aisladas, ni enfrentadas, ni tampoco opciones que podamos elegir alternativamente. Movimiento y quietud, viaje y hogar, no son los bandos enfrentados de una contienda, sino la expresión del latir con que la memoria y el cuerpo, en expansión y en contracción, fundan su propio ritmo constitutivo.