BERGSON, HENRI
Revisado en profundidad y atención, lo que hace Berson es una cuidadosa operación de desmontaje de la tesis tradicionales que han dado una cierta fisonomía al decurso del pensamiento filosófico en vista de liberar de todo condicionamiento trascendente e incluso idealista a la soluciones de determinados problemas clásicos de esta disciplina. Es por ello que hay una inmanencia en el proceso del dormir, pues en el proceso de transformación de los sueños se hace extensiva y se materializan las potencialidades que recorren el ejercicio de nuestro pensamiento. El sueño entonces, revisitado de esta manera, no sería sino una experiencia, tan habitual como peculiar y singular, que pone en libertad nuestra sensibilidad, la materia que la subtiende a través de aquella otra serie de variaciones que dan forma a nuestros recuerdos, un mixto complejo, a veces absurdo e incoherente, pero que señala de modo consistente los materiales que habitan y pueblan de modo siempre variante las alteraciones que se extienden en el campo de nuestra experiencia. En cierto sentido, la experiencia del sueño nos señala, por su cotidianidad y habitualidad, que en el fondo nuestra experiencia -aquel subsuelo de la conciencia- no sería sino artística, que su naturaleza, su carácter en definitiva, es eminentemente estética, no teórica ni especulativa como continuamente se ha querido establecer por la tradición.
Miguel Ruiz